El paso del tiempo y un mantenimiento inadecuado pueden jugarnos una mala pasada, por eso, explicaremos cómo desinfectar las alfombras correctamente. Así, evitaremos que los tejidos con los que están fabricadas acumulen ácaros, bacterias y otros gérmenes.
Pasos para desinfectar una alfombra
La lana, pelo de cabra, seda, algodón o tela sintética de la que suelen estar hechas estas piezas va recogiendo restos de suciedad, como pelos humanos o de animales, tierra, hollín... Por eso es aconsejable que las sometamos a un mantenimiento frecuente. Estos son los pasos para lograr el mejor resultado:
✔️ Pasar la aspiradora. Es algo que deberíamos hacer, al menos, una vez a la semana. Es recomendable dar la vuelta a la alfombra para eliminar la suciedad por ambos lados. Esta tarea debemos llevarla a cabo de manera lenta y constante.
Cómo guardar las alfombras en verano
✔️ Espolvorear bicarbonato de sodio. Ayudándonos de un cepillo de cerdas suaves o un paño seco, dejaremos actuar este producto unas 24 horas y, después, lo retiraremos con la aspiradora. Hemos de hacerlo una vez al mes, para acabar con los malos olores.
✔️ Limpieza profunda a mano, a vapor o en la lavadora. Al menos dos veces al año, si las dimensiones nos lo permiten, meteremos la alfombra en la lavadora con un detergente suave y ecológico. Si no, disolveremos este producto en agua, lo verteremos con un espray y frotaremos a mano. Podemos usar unas gotas de aceite esencial de perfume. Una opción eficaz y con un alto poder desinfectante es practicar una limpieza a vapor.
✔️ Secado. Es recomendable que la alfombra se seque al aire, evitando que le dé la luz solar de manera directa, puesto que podría comerse el color y provocar manchas.
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Actuando debidamente, evitaremos que se conviertan en verdaderos focos de infección. Para cualquier duda sobre cómo desinfectar las alfombras, los usuarios pueden contactar con nuestra empresa.
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